En éste rincón, donde escribo lo más secreto de lo que soy
capaz de mostrar de mi faceta carrerista, y donde se enumeran ya unas cuantas
crónicas y carreras con éxitos y buenos momentos, casi siempre, no puedo dejar de
reflejar las enseñanzas que te pone delante de los ojos carreras como la de
ayer.
Empezando por el final, llego a meta con un tiempo de 44:50,
a un ritmo medio de 4:29 min/km. pero casi sin oxígeno para poder apretar en el
tramo final de carrera. Sin objetivo claro, sin reloj ni pulsómetro (lo había
dejado, a voluntad, en el coche) ni ritmo previsto, lo que hice fue correr hasta ver qué es lo
que pasaba.
Y lo que pasó fue que entre 2.000 atletas que tomamos la
salida, hasta el km. 7 a ritmo más o menos constante me sentía bien de piernas.
El recorrido es llano salvo los 2 primeros km. que pica ligeríííííísimamente
pa´rriba y sobre el km. 7 antes de llegar a la zona del “Rinconín”. Claro que
si no sabes que vas justo por alguna circunstancia y te mantienes constante,
esto pasa factura.
Y así fue, en el km. 8 aprox. Llegando ya a la playa veo que
mi ritmo no lo puedo aguantar, no por fuerza de piernas, si no por darle
oxígeno.
(Ay Carlinos, esos entrenos específicos de velocidad y series que no
haces – pienso …). Me quedo en “la sala de recuperación” unos metros detrás de
un corredor que llevaba delante intentando coger aliento. Al llegar al km. 9 hago lo
mismo, y así entro en meta con el crono por debajo de los 45 min.
Desde ayer me ronda la cabeza que, en este momento, lo que
necesito es un plan con un objetivo para mejorar. Desde el maratón de Langreo
no tenía objetivos claros más que correr y entrenar disfrutando. Montaña,
asfalto, me daba igual.
Ahora, además de
esto, necesito sentir mejoría.
Y todo se ve gracias a una carrera, que cuando no te
deja esa medio sonrisa tonta, sabes que hay algo detrás... Y hay que aprender de
ello...
Y, acabando por el principio, cómo alegra correr
rodeado de amigos (para algunos su primera carrera), viendo cómo cada uno cumple sus expectativas con hambre de
más km., y sentirse rodeado desde la cuneta.
Gracias por los ánimos y las fotos
Hay que seguir entrenando y visualizando próximas carreras... ¿ Coto - Musel en Laviana ? ...
Nos vemos
Nos vemos